Este grupo está constituido por personas nacidas entre 1984 y 2000.
En España un 28% de los individuos en edad laboral (18 a 65), son millennials, llegando hasta 8,1 millones.
Existen muchas diferencias entre generaciones, que encontrarás en nuestro estudio Qué son Millennials y cómo trabajar con ellos.
Entonces, ¿cómo puedo liderar a millennials de forma eficiente?
Los millennials conciben el liderazgo de forma muy diferente a otras generaciones anteriores. El estilo de dirección dominante basado en la jerarquía no funciona con ellos. Desean un estilo más basado en la confianza y la admiración.
Esperan responsables cercanos, que puedan compartir su conocimiento y experiencia, que valoren sus capacidades y fortalezas para animarles y sacarles el mayor partido.
Para esto, es muy positivo practicar la escucha activa y el feedback. Hablar con los millennials del equipo, a menudo, ayudándoles a distancia, con algo de libertad para que puedan probar, innovar, y ante todo aprender sin miedo al error. El error es la antesala del aprendizaje.
Cambiemos una sola evaluación anual por un feedback constante. Sea por la educación, con felicitaciones periódicas, o por la inmediatez de las redes sociales que han usado toda su vida, los millennials no quieren esperar a la evaluación anual para saber si están trabajando bien.
Usar el feedback como herramienta mejorará el rendimiento y motivación del equipo millennial. Además de hacerse de forma continuada y natural, este pasará a formar parte de la cultura de la empresa, mejorando mucho la comunicación global en la empresa.
Según Deloitte, el 44% de los millennials dicen estar estresados todo o la mayoría del tiempo. Además un 33% se ausentaron de su trabajo por este motivo. De estos, solo el 44% (y 38% de los de la Generación Z) confirmaron en la empresa que esa fue la razón.
Esto obliga a establecer una comunicación clara y concisa en relación a los objetivos. Además realizar un seguimiento periódico, con el feedback antes mencionado, siguiendo la finalización de objetivos del plan, evitando siempre el micromanagement.
El reto es mezclar de una forma inteligente la planificación con la improvisación de los hábitos diarios de los millennials.
Son realmente buenos improvisando, cualidad que valoran mucho los departamentos de captación y talento. Para estos jóvenes su gran reto es precisamente ese: unir de forma coherente la planificación con la improvisación en sus hábitos diarios.
Es esencial que estos, como en el fondo cualquier otro empleado, no sientan que los objetivos han sido forzados, sino que mejor obviamente los tengan como propios para moverlos a mayores niveles de involucración y compromiso en el trabajo.
Los millennials aprecian mucho el balance entre trabajo y familia. Es por ello que les parece muy atractiva la opción de trabajo en remoto, ya sea eligiendo ellos los días o algunos establecidos por la empresa a la semana. En su último estudio sobre los millennials, Deloitte establece que un 69% piensa que trabajar desde casa reduce su estrés y un 67% considera que les permite mejorar su conciliación familiar y laboral.
Además, hasta el 50% dicen que se sentirían más “ellos mismos” trabajando desde casa. Esa cifra es mayor en aquellos Millennials con descendencia (59%) que aquellos sin (43%). Adicionalmente es también mayor en aquellos en posiciones de liderazgo (62% contra un 46% en puestos más junior 46%).
La generación millennial, jóvenes con mucho potencial, necesitan confianza con sus responsables, capacidad de trabajo autónomo y sensación de pertenencia.
Con lo anterior, así como lo descrito en nuestro informe, es completamente posible liderar de forma efectiva a un equipo de millennials y disfrutar del proceso con ellos.